Manolo Jiménez dedicó prácticamente toda su vida deportiva al Sevilla FC. Primero en el Sevilla Atlético, filial del equipo hispalense, desde donde dio el salto al primer equipo en la temporada 83/84 debutando ante el Real Valladolid en el Estadio José Zorrilla.
No fue hasta la campaña siguiente, cuando Jiménez fue parte de la primera plantilla. Jugando como lateral izquierdo, permaneció en la entidad sevillista hasta la temporada 96/97, siendo uno de los futbolistas que más partidos ha disputado con la camiseta del Sevilla FC.
Tras dejar el Sánchez Pizjuán, Jiménez ficho por el Real Jaén. Con los lagartos jugándose la permanencia en Segunda División, Jiménez sufrió una lesión que le obligaría a colgar las botas al término de la temporada 97/98 a la par qué, el Real Jaén bajaba a la categoría de bronce del fútbol español.
